domingo, 31 de marzo de 2013

MÉXICO EN EL PROCESO DE GLOBALIZACIÓN.



El término globalización genera todo tipo de reacciones, en sentido positivo y negativo, ambos son tan validos como las teorías mismas, ya que los efectos de este fenómeno se pueden vislumbrar de las dos formas. Entendemos por globalización el proceso por el cual las personas, las sociedades y los gobiernos interactúan mediante el comercio y la inversión, en el ámbito internacional, generando efectos en todos los aspectos de los grupos sociales.

La globalización tiene como efecto principal la integración del comercio mundial, destacando los mercados financieros, y el desarrollo de tecnología, dando como resultado una unificación del mercado, afectando los sistemas económicos locales, para dar paso a políticas económicas y de gobierno globales.

El gran número de operaciones comerciales, así como la competencia entre los países para aplicar las medidas que permitan el desarrollo económico, el contexto internacional en la exigencia de los mercados, las maravillas tecnológicas aplicadas al transporte,  entre otros muchos otros factores, orillan a que busquemos adaptarnos al panorama mundial, el cual se desarrolla de forma global, no es extraño encontrar posturas ideológicas que determinan que estamos dentro de la globalización desde hace siglos, algunos dicen que el país no es más globalizado que el siglo pasado, y es que es una realidad que estamos dentro de un globo y actualmente lo que le afecta económicamente a un país, trae consecuencias para todo el orbe, buscando de esta manera estudiar el proceso para que los actores en el plano económico mundial crezcan y mantengan su sistema económico sano.  

La tendencia mundial es apegarse a las medidas que permitan a los países en desarrollo el crecimiento constante, la globalización permite a estos países y sus ciudadanos desarrollarse económicamente y mejorar sus niveles de vida, abatir la pobreza y alcanzar a cubrir las necesidades básicas en salud y alimentación. En México se busca integrarnos de la mejor forma a esta tendencia, por lo que se ha optado por el libre mercado, desarrollando el comercio y captando mayor inversión extranjera, eliminando los obstáculos para la realización de las actividades económicas.  

La globalización es muy controversial,  sus partidarios sostienen que la misma permite a los países en desarrollo, crecer económicamente y mejorar los niveles de vida de sus ciudadanos. Por otro lado los oponentes destacan que el libre mercado, beneficia a las  corporaciones multinacionales a expensas del capital humano, las materias primas, y afecta en gran medida el sistema cultural.

Nuestro país ha tenido importantes modificaciones en su sistema económico con el fin de adaptarse al proceso global, es de destacar que se realizo la sustitución  del sistema económico en los años 80 al pasar del modelo de sustitución de importaciones a un modelo neoliberal, en el que la tendencia es la desregulación del comercio, internacionalización en las importaciones y exportaciones, y privatización en los negocios (hasta el sector financiero).

México busca el desarrollo económico siendo un jugador más en el fenómeno de la globalización, tomando participación en el contexto internacional, por lo que ingreso al GATT en 1986, ahora es miembro de la OMC. Se han realizado reformas para la participación en la mayoría de actividades económicas para la captación de Inversión Extranjera. Se realizó la privatización en el sector financiero. Además es de destacar la celebración del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN). Todas estas etapas de integración, han sido con la intención de tener participación en el contexto del comercio mundial, no obstante esto también nos ha puesto a competir con los países asiáticos –manufactureros–, los cuales son unos excelentes jugadores en el plano de la globalización.

Podemos señalar que la globalización permite tener más acceso a los flujos de capital y la tecnología, además de expandir los mercados, los beneficios pueden ser muchos pero no debemos dejar de observar que los efectos negativos están latentes, por lo que las reformas que necesita el país deben ser con un panorama integral puntualizando cada uno de los aspectos de este fenómeno para favorecer a nuestro sistema económico y competir mejor internacionalmente.